ENVEJECIMIENTO.
A todos los cambios biológicos estructurales y
funcionales que acontecen a lo largo de la vida, desde el desarrollo
embrionario hasta la senectud denominamos envejecimiento. Se trata de un
proceso deletéreo, dinámico, complejo, irreversible, progresivo, intrínseco y
universal que con el tiempo ocurre en todo ser vivo a consecuencia de la
interacción genética de éste y su medio ambiente. Los cambios biológicos
producen, en los órganos, pérdida de función y una disminución de la máxima
capacidad funcional, pudiendo muchos sujetos seguir con su capacidad de reserva
funcional (variable entre las personas y, también, entre los diferentes órganos
de cada persona) más allá de las necesidades comunes. Los sistemas de
reparación, durante la época posmadura, no van a ser capaces de eliminar
completamente las lesiones de la acción de envejecer sobre las células, tejidos
y órganos produciéndose, como resultado, el deterioro progresivo de los
sistemas por acumulación de lesiones.
No
existe una definición de envejecimiento lo suficientemente convincente y,
dependiendo de las diferentes perspectivas que se consideren, podemos destacar
las siguientes:
Según Frolkis sería: “Un
proceso biológico multifactorial, que comienza mucho tiempo antes que la vejez,
y que evoluciona de forma continua, siguiendo un curso determinado por las
propias características intrínsecas”.
Según Brocklehurst sería: “Un proceso progresivo de desadaptación del individuo
al medio que le rodea, que termina con la muerte”.
Según Bourliere el envejecimiento incluye “Todas las modificaciones
morfológicas, fisiológicas, bioquímicas y psicológicas que aparecen como
consecuencia de la acción del tiempo sobre los seres vivos”.
».
Según Rowe el envejecimiento humano muestra como notas
definidoras el ser:
·
Lineal, como
proceso que se extiende a lo largo de la vida y que cristaliza en un
determinado momento.
·
Inevitable, ya
que no puede detenerse salvo en la muerte.
·
Variable, por no
ser semejante en los individuos que nacieron en la misma época y situación.
·
Asíncrono, pues
no se produce con el mismo grado de desgaste en los diferentes órganos.
Según Ollar: el envejecimiento “Es un proceso natural de duración
variable, homogéneo para cada especie, sobre el que influyen numerosos factores
condicionantes, algunos propios del individuo (genéticos) y otros ambientales o
circunstanciales. Este proceso es dependiente del tiempo y consiste en un
progresivo incremento de la vulnerabilidad y la disminución de la viabilidad
del organismo, asociados con una creciente dificultad en las posibilidades de
adaptación y una mayor susceptibilidad de contraer enfermedades, lo que
eventualmente conduce a la muerte".
Envejecimiento fisiológico es aquel que cumple una
serie de parámetros aceptados en función de la edad de los individuos y, sobre
todo, le permiten una buena adaptación
Física, psíquica y social al medio que le rodea. La
fisiología está enfocada a la estructura y función de los sistemas biológicos
corporales.
El envejecimiento es patológico cuando la incidencia
de procesos, fundamentalmente enfermedad, alteran los diversos parámetros e
impiden o dificultan la correspondiente adaptación. Es decir, que cuando se dan
situaciones especiales o adversas que producen un empeoramiento de la capacidad
funcional orgánica el proceso de envejecimiento fisiológico natural se
transformaría en patológico.
FISIOLOGIA
DEL ENVEJECIMIENTO.
Fisiología es la ciencia que estudia las funciones de
los seres vivos y su regulación, incluyendo la homeostasis y la adaptación. En
la vejez ocurren una serie de cambios a nivel molecular, celular, de tejidos y
de órganos que contribuyen a la disminución progresiva de la capacidad del organismo
para mantener su viabilidad. Sin embargo, este declinar no es uniforme en
velocidad ni magnitud. En ciertas funciones, la regulación del organismo se
mantiene aceptable hasta una edad avanzada, por ejemplo el equilibrio
ácido-base. En otras funciones el organismo empieza a declinar relativamente
pronto, en la edad adulta, mantenido un descenso constante como ejemplo tenemos
el deterioro de los órganos de los sentidos. Otras alteraciones, en último
lugar, comienzan muy pronto en la vida, peno sus efectos solo se manifiestan
cuando han progresado lo suficiente para poden objetivarse a través de sus
complicaciones, pon ejemplo la ateroesclerosis. La heterogeneidad fisiológica
es una de las características más consistentes de la población que llega a vieja.
A nivel biológico los cambios del envejecimiento
suponen una involución caracterizada por la disminución del número de células
activas, alteraciones moleculares, celulares y tisulares que afectan a todo el
organismo, con progresión que nunca es de carácter uniforme. Los cambios más
significativos se dan en el corazón, pulmones y riñones.
Todas las células experimentan cambios en el proceso
de envejecer; se hacen más grandes, y poco a poco pierden su capacidad para
dividirse y reproducirse. Por ello, pierden su funcionalidad o bien inician un
proceso de funcionamiento anormal.
La célula puede morir por necrosis o por apoptosis. La
necrosis es un proceso puramente antrópico, debido a la pérdida de la capacidad
de la célula para transformar la energía externa. Por el contrario, la
apoptosis es un fenómeno muy ordenado y regulado por el que la célula se
suicida a través de un estímulo que puede ser una señal fisiológica o una
agresión muy leve. Este proceso es esencial para el desarrollo y remodelación
normales.
El
cuerpo está formado por células, estas a su vez forman tejidos, los tejidos a
su vez forman órganos, estos forman aparatos y, a su vez estos componen los
sistemas que mantienen el cuerpo vivo.
A nivel tisular varios factores
convergen en el envejecimiento de los distintos tejidos:
·
Factores
genéticos: alteraciones de los
cromosomas y de las divisiones celulares.
·
Factores
metabólicos: síntesis de proteínas
anormales y toxicidad por radicales libres.
·
Factores
inmunológicos: reducción de la
capacidad inmunológica humoral y celular.
·
Factores de
riesgo sobreañadidos: tabaco,
alcohol, colesterol elevado, obesidad, diabetes mellitus, hipertensión, etc.
·
Factores
vasculares: arterioesclerosis con
disfunción sobre la microcirculación.
·
Factores
hormonales.
·
Factores
accidentales: patologías sistémicas,
intervenciones quirúrgicas, traumatismos….
En ausencia de un perfil completo del envejecimiento,
y conscientes de la variabilidad temporal de los cambios en la vejez, los
fisiólogos han dirigido gran parte de sus estudios a los cambios
edad-dependientes que afectan a los mecanismos integrales. Estos mecanismos son
los que mantienen la homeostasis, es decir, los que aseguran la constancia del
medio interno a pesar de la variabilidad del externo. El envejecimiento
representa, por lo tanto, una disminución en la capacidad de adaptación debida
a una reducción de la flexibilidad de los mecanismos fisiológicos que regulan
el equilibrio necesario para mantener constante el medio interno. El control de
la homeostasis requiere que se mantenga intacta la función integrada de órganos
y sistemas para una correcta actuación biológica del organismo.
El cuerpo humano posee variados sistemas de control y
si uno de los sistemas falla, el equilibrio homeostático se ve en riesgo y en
ocasiones el fallo puede ser incompatible con la vida. Los más complejos son
los sistemas de control genético dentro de la célula, pero existen otros que se
hacen patentes desde el punto de vista de un órgano o sistema como un todo.
Dentro de estos mecanismos de control, tenemos la
regulación de concentraciones de oxígeno y dióxido de carbono, regulación de la
presión arterial, la regulación de la temperatura corporal y regulación
hormonal, entre otros.
RETROALIMENTACIÓN NEGATIVA
Si un factor cualquiera alcanza concentraciones
excesivas o demasiado bajas, un sistema de control inicia una retroalimentación
negativa que consiste de una serie de cambios que devuelven al factor antes
mencionado hacia un valor medio determinado, con lo que se mantiene la
homeostasis. Un buen ejemplo es la regulación de la concentración de dióxido de
carbono en el organismo. Cuando existe una concentración incrementada de CO2 en
el líquido extracelular, se aumenta la ventilación pulmonar, lo que al mismo
tiempo hace disminuir la concentración del gas en el medio interno, ya que
aumenta su expulsión en cada respiración. Esto es lo mismo que decir que la
respuesta es negativa con respecto del estímulo inicial. Del modo contrario, si
el CO2 disminuye de manera excesiva, se comienza el proceso del sistema de
control para que los niveles del gas se incrementen a un nivel adecuado del
mismo ya que es de vital importancia para el ser humano.
RETROALIMENTACIÓN POSITIVA
A la
retroalimentación positiva también se le conoce como círculo vicioso y es
regularmente fatal para el organismo que lo padece. Una retroalimentación
positiva, al contrario de la retroalimentación negativa, no deriva en una
estabilidad del sistema, si no en una inestabilidad peligrosa. Un ejemplo:
cuando se padece una hemorragia severa de dos litros de sangre, el volúmen
circulatorio es tan bajo que el corazón no dispone del suficiente como para
bombear con eficacia. Esto hace que la presión arterial caiga y también el
flujo de las arterias coronarias, fallando el aporte de oxígeno al miocardio,
lo que a su vez debilitará más al corazón haciendo que la función de bomba sea
más débil y disminuida, continuando así hasta que el sistema se colapse por
culpa del círculo vicioso generado.
En
muchos casos el mismo organismo tratará de proveer una retroalimentación
negativa para romper el círculo vicioso en el que se encuentran los factores.
Si en el ejemplo de la hemorragia, a la persona en lugar de dos litros perdidos
de sangre fueran solo un litro, los mecanismos de control normales
proporcionarían la retroalimentación negativa para controlar el gasto cardiaco
y la presión arterial compensando de manera eficaz la retroalimentación
positiva. Durante el parto ocurre un efecto beneficioso de la retroalimentación
positiva con la hormona oxitocina.
Características fisiológicas
del envejecimiento
1.
La función
fisiológica de muchos órganos y sistemas declina con la edad , considerando
diferencias en el grado de afectación de los diferentes sistemas y con amplia
variabilidad individual.
2.
Los cambios
fisiológicos asociados a la edad no tienen significación clínica cuando el
organismo está en reposo, pero sí en situaciones de estrés (ejercicio,
enfermedad, fármacos) donde el anciano tiene menor respuesta o capacidad
reactiva.
3.
Hay una
alteración en los sistemas homeostáticos con el curso del envejecer.
4.
Los cambios
fisiológicos determinan la esperanza de vida o supervivencia máxima potencial
de una especie (de 120 años en el ser humano), mientras que la expectativa de
vida al nacer en los individuos de cada sociedad viene determinada por la
interacción entre factores personales, ambientales y sociales.
Consecuencias clínicas de
los cambios fisiológicos del envejecimiento
·
Diferente forma
de presentación de las enfermedades en el anciano
·
Susceptibilidad
ante la enfermedad
·
Alteraciones o cambios en la cinética y dinámica de los
fármacos en relación con cambios en la composición corporal y variaciones en la
función hepática y renal.
·
Alteración
de los rangos de referencia de las
pruebas complementarias de diagnóstico usadas en la práctica clínica.
mis cuales son las actividades que dejo de este blog
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